A lo largo de los años, El Charco, ubicado en la desembocadura del río Tapaje, departamento de Nariño, ha demostrado su capacidad para crecer, adaptarse y prosperar en medio de las dificultades que se han derivado del conflicto armado en la región. Con cada paso que se ha dado, se ha reafirmado el compromiso colectivo de seguir avanzando hacia un futuro lleno de oportunidades para sus habitantes y de continuar transitando hacia un territorio sostenible, de cara a los retos que se tienen frente al cambio climático.
Aunque ha sido un año complejo por razones de seguridad y presupuesto, la alcaldesa Diana Milena Palacios ha puesto “el alma y corazón” para sacar adelante los proyectos y programas que tiene prevista su administración para mejorar las condiciones de vida de la población tanto en la zona urbana como rural. Por eso, ha estado activa frente a propuestas como la economía para la vida, que se teje desde los territorios, de la mano de las organizaciones solidarias, populares y comunitarias. La idea es promover procesos productivos para la subsistencia, desde las necesidades de la gente, en un territorio donde ha renacido la esperanza. En esa línea, la sostenibilidad ambiental se constituye en un eje fundamental.
En diálogo con la Revista El Congreso Siglo XXI, la mandataria anunció que su administración se propone rescatar el medio ambiente, recuperar los ecosistemas que han sido afectados y aprovechar la biodiversidad que alberga el municipio, para contribuir al bienestar social de las comunidades del Pacífico nariñense. También, se busca impulsar el turismo sostenible, restaurativo y regenerativo en El Charco, un territorio con una enorme riqueza en flora y fauna.
¿Cómo han sido estos primeros 10 meses de gestión?
Han sido algo duros, como primera mujer que está al frente de la administración, hemos tenido mucho miedo de enfrentarnos a los retos políticos que el cargo impone, pues el machismo en estos territorios es muy fuerte y en medio de todo hemos logrado establecer alianzas y relaciones con entidades y personas interesadas en contribuir al desarrollo del municipio.
Como es sabido, El Charco es uno de los municipios más complejos de este país, recibimos una administración en donde en un mismo período hubo más de seis alcaldes, retos que estamos afrontando para corresponder a los más de 41 mil habitantes de la región. La esperanza es lograr grandes cambios pues como habitante de El Charco y como mujer que conoce las necesidades del municipio, estoy comprometida con ayudar a mi pueblo con una gran voluntad de iniciar los cambios que las comunidades merecen. En este primer año hemos estado aprendiendo, organizando el desorden que encontramos, pero la mirada está puesta en el porvenir.
Por ejemplo, fui la primera mandataria en hacer realidad la implementación del aporte a la seguridad social a Gestores y Creadores Culturales del municipio. Este beneficio se da de acuerdo con lo establecido en el Decreto 2012 del año 2017, que regla- menta la Ley General de Cultura, y establece los requisitos que se deben cumplir para acceder al mismo. Allí se señala que a través del 10 % de la Estampilla Pro-Cultura, se puede favorecer un Gestor y Creador Cultural con un ingreso de por vida cada dos meses, pagadero por medio del pro- grama de los Beneficios Económicos de Colpensiones BEPS.
¿Cómo van las obras para la protección fluvial del Río Tapaje?
Estas obras se han atrasado, hemos estado en contacto con los contratistas y nos hemos metido a pecho en estas diligencias, porque si nosotros como mandatarios no nos ponemos al frente de los trabajos, no vamos a obtener los resultados que necesitamos, pues estas personas son agentes externos y necesitan que nosotros tomemos acción y entremos a apoyarlos, hoy por hoy hemos estado al frente para revisar la facturación y los pagos para que la obra avance. Hemos hecho contacto con Corponariño, de quien recibimos luz verde para que al emitir la facturación se pueda entregar el permiso del cauce y en unos 10 ó 15 días, ya estemos iniciando, nuestra premura radica en que las casas del municipio donde se va a construir la muralla se están agrietando, de allí nuestro afán para que se inicie esta obra.
¿Cómo fue su experiencia en la Feria de Economías para la Vida y los proyectos que se tienen?
Estuvimos en este importante evento para mi municipio e incluso para el departamento, porque precisamente es en este tipo de espacios donde nosotros nos mostramos como fuertes representantes de la Minería, pero ante esa fortaleza necesitamos también orden, un orden que nos ayuda con el desarrollo, la formalización de nuestros pequeños y medianos mineros y contribuye a esa transformación con nuestros seres humanos, para que puedan someterse a la reglamentación que establece la ley 70 en el capítulo 5° del nuevo Decreto para este sector. Queremos asociar a las barreteras y barreteros de nuestro municipio, lo que hará que la economía de El Charco sea más fluida, garantizada y estable.
¿Qué ha implementado para garantizar la sostenibilidad de la minería?
Hemos logrado para este fin que, mediante el trabajo articulado del Ministerio de Minas, los campesinos y habitantes del municipio, se pueda entrar a una ruta de orden, hemos establecido una plataforma que se llama Génesis, donde se registrarán todos nuestros mineros con la intención de establecer las rutas de trabajo y atención para poder llevar proyectos productivos a las comunidades, que nos ayuden con la consolidación de nuestro territorio, no solamente hablamos de la minería con los pequeños mineros, sino también de las personas que entran a seleccionar otras formas de trabajar, estas serán incluidas para participar en la nueva organización basada en el decreto del cual hemos ve- nido hablando y estamos promoviendo, así podremos formalizar todas las áreas de negocios que existen en el territorio.
¿Cómo está El Charco en materia de seguridad?
Lo primero que un mandatario debe tener es cercanía con su gente, una buena convivencia y ayudar con estrategias. Hoy, en materia de seguridad hemos realizado ya varios consejos y estamos entrando a la ejecución del plan integral, donde hemos analizado las alertas en el casco urbano, en las veredas y hemos re- visado las situaciones de desplazamiento forzado. Gracias a Dios no hemos perdido vidas. En lo corrido del año se nos presentaron al menos 3 desplazamientos, por enfrentamientos, pero lo hemos controlado, además hemos podido trabajar tranquilos, quien o quienes lleguen a El Charco se encontrarán con un territorio tranquilo, con valores, donde prima la solidaridad, la sana convivencia y el trabajo mancomunado con las autoridades y nuestras comunidades, por lo que la seguridad ya es una garantía para la gente del municipio. Asimismo hay que destacar que es la primera vez que un Presidente hace presencia en el municipio, gracias al trabajo que en materia de seguridad se ha realizado.
¿Cómo están afrontando el desabastecimiento de agua?
En El Charco tenemos un acueducto desde hace más de 30 años y ahí nos quedamos. Estamos abasteciendo agua por sectores. Desde la administración tenemos un proyecto para la ampliación de las redes de acueducto para algunos barrios que nunca han tenido agua; ya tenemos a los ingenieros haciendo su trabajo, colocando la tubería y las herramientas para garantizar el servicio. Lo- gramos llevar una máquina de bombeo a una de las veredas más grandes, en el Alto Tapaje. También estamos gestionando con el Ministerio de Vivienda la adquisición de otras máquinas para abastecer del recurso hídrico a otras zonas donde se ha extendido el municipio. Con el Ministerio de la Igualdad estamos buscando colaboración de algunas em- presas. Dejamos radicado un proyecto para la construcción de dos acueductos veredales. Tenemos cuatro casas aguateras; se tienen algunos recursos para avanzar, pero todavía nos hace falta apoyo. Hago un llamado al Gobierno para que estén más pendientes de esta mujer que está para hacer las cosas bien y dejar en alto a su pueblo. En el Bajo Tapaje se iniciaron obras para el acueducto, pero no han avanzado lo suficiente.
¿Qué iniciativas de turismo sostenible y regenerativo existen en El Charco?
El Charco es rico en flora y fauna. Queremos rescatar el medio ambiente y lo que somos nosotros, destinando esfuerzos para mitigar la contaminación. La COP 16 también somos el Pacífico colombiano. Hay que prestar atención a las iniciativas para la protección de los ecosistemas. Aunque nuestro municipio es rico en turismo, no se le ha dado el valor suficiente a este sector. Debemos aprovechar la riqueza en ecosistemas y biodiversidad de El Charco y visibilizar eso en la COP16 con el objetivo de con- tribuir al bienestar social y económico de las comunidades negras e indígenas del municipio.
¿Cómo están incentivando el ecoturismo?
Para incentivar el ecoturismo primero debemos mejorar las condiciones ecológicas e implementar los proyectos para descontaminar el territorio. Como administración tenemos una hoja de ruta, que es trabajar en los proyectos para la transformación del territorio, con la restauración ecológica de nuestros manglares. Nos estamos articulando con el Ministerio de Minas, el Instituto Colombiano de Bienestar Fa- miliar, ICBF, la Gobernación de Nariño y el Servicio Nacional de Aprendizaje, SENA; con estos últimos estamos llevando unas mallas para los pescadores artesanales. Tenemos un proyecto de restauración ecológica de los mangla- res junto a los municipios de El Charco, Santa Bárbara, La Tola, Olaya Herrera y Mosquera, con una inversión de más de $23 mil millones; se trabajará con viveros, iniciativas agroforestales, con comunidades, grupos asociativos y comerciales. Es un proyecto muy grande que nos gustaría presentar en la COP16.