Arauca, un ejemplo de transparencia
Además de la modernización de las instalaciones, el secretario de Hacienda del departamento de Arauca, Manuel Calderón Sánchez, ha impulsado la unificación de todos los sistemas para una mayor eficiencia en la información y un manejo adecuado de los recursos públicos que garantice transparencia en la gestión. Entre sus logros, se destaca la creación de grupos especializados para frenar el contrabando, recaudar impuestos y combatir la evasión fiscal. Bajo su administración, son muchos los avances alcanzados para beneficio de la población, como la ampliación de las oficinas de la Secretaría de Hacienda, para que quienes lleguen a cumplir con sus obligaciones tributarias cuenten con un lugar apropiado para pagar sus impuestos. También se desarrolló un software para unificar todos los sistemas con el fin de contar con la información en tiempo real, dinamizar el trabajo y lograr eficiencia y resultados en el corto y mediano plazo. La planificación y organización se han convertido en su obsesión. Es por ello que promovió, desde su despacho, la creación de cuatro grupos, los cuales han sido indispensables para el aumento de los recursos propios del departamento: uno operativo, otro de fiscalización, un tercero de cobro coactivo y un cuarto de auditoría; este trabajo articulado ha permitido controlar la evasión, elevar el rendimiento financiero y mejorar el ambiente para los empleados de la entidad y los contribuyentes. Además, el secretario señala que uno de sus más grandes logros fue la realización de una convocatoria pública para las principales cuentas bancarias de la Gobernación, lo que permitió un aumentó del 3% efectivo anual al 7,01%, lo que significó un aumento del rendimiento financiero de cerca del 130%. “Arauca estaba cobrando sus impuestos en efectivo, recaudaba en una Tesorería y, a partir de junio 2017, logramos que con el banco se unificaran las plataformas y se pudieran recaudar los impuestos en todo el departamento”, explica Calderón. Autosostenible en salud Sin dejar a un lado el tema del posconflicto y los acuerdos de paz, el secretario de Hacienda dirigirá sus esfuerzos en lo que resta de administración a fortalecer el sector salud para que sea autosostenible. “En la investigación que hice me di cuenta de que el departamento lo estaba haciendo mal, porque estaba colocando unos recursos, pagando una duplicidad de unas funciones que son propias de las EPS. El gobierno departamental tiene una responsabilidad en una rentabilidad social, no es solamente económica y, si yo puedo sacar un proyecto de complemento en salud pública, lo voy a hacer”, señala el funcionario. Sin dudarlo un momento, cree que el mayor obstáculo que tienen las regiones para operar como se debe es la concentración de recursos en Bogotá, así como la excesiva carga de obligaciones que se le ha trasladado a las ciudades y municipios, lo que impide la ejecución a tiempo de los programas de gobierno en materia de salud, educación, infraestructura vial, saneamiento básico y vivienda. Los efectos de la crisis venezolana El impacto social y económico de la crisis venezolana en el departamento ha sido fuerte, sobre todo en el tema ligado a la salud. Se calcula que solo en el Hospital San Vicente de Arauca la deuda por atención a la población que ha llegado procedente del vecino país alcanza los $4.500 millones de pesos. “El Gobierno realizó un giro, de acuerdo a las normas que han salido a nivel nacional, del cual le correspondió a Arauca un monto de 45 millones de pesos. Mirando proporcionalmente la cifra, el peso presupuestal y social lo deben soportar los mismos territorios, lo cual es injusto”, agrega. La migración venezolana también se ha sentido en el campo laboral. Muchas de las personas que han llegado al departamento se han empleado como vendedores ambulantes, obreros de construcción y mujeres estilistas, con un salario bajo, lo que ha afectado la mano de obra de los colombianos en esa región. “Para un venezolano que se gané cinco mil pesos diarios, es mucho dinero, si se tiene en cuenta el sistema cambiario”, sostiene Calderón. Arauca y el posconflicto El secretario de Hacienda de Arauca está convencido de que la firma de los acuerdos de paz ha sido positiva para el país, entre otras cosas, porque se han evitado alrededor de 4.600 muertes violentas. Como contacto entre el territorio, la Gobernación y el Alto Comisionado para la Paz, Calderón considera que los beneficios de la desmovilización de las FARC son altos en materia de seguridad. “Tuve la oportunidad de mirar el informe del Ejercito Nacional en el que se reporta una reducción del 98% de las acciones militares en el territorio que conforman Casanare, Arauca, parte de Boyacá y parte de Santander”, afirma. Por ello, con certeza, defiende la salida negociada al conflicto armado colombiano. “En ningún país del mundo, ni en ninguna época del mundo, se ha ganado una guerra con guerra, después de Cristo”, recuerda. Aunque reconoce que esa región no ha recibido hasta el momento ningún beneficio económico con el posconflicto, sí destaca su impacto en lo social. “Arauca acaba de ser declarado el primer departamento libre de coca, después de que era el segundo productor más grande de Colombia”, lo que, en su concepto, encubará una gran inversión para proyectos productivos integrales. Se inició en el departamento de Arauca con la erradicación de cerca de 600 hectáreas de cultivos ilícitos en el departamento de Arauca. Unidad de Salud de Arauca realizó segundo Comité de Vigilancia Epidemológica (COVE) departamental, 2018.