Desde el año 2016 venimos liderando, en la Cámara de Representantes, la propuesta de Ley 126, con el apoyo de colegas de diversos partidos. Con esta iniciativa buscamos “proteger los 37 complejos de páramos que abastecen de agua al 70 % de los colombianos” y convertir este proyecto en una alternativa efectiva a una realidad que se vive en diferentes zonas del mundo: la falta de agua potable.
Expertos internacionales afirman que Ciudad del Cabo en Sudáfrica y sus habitantes están cruzando el límite, que amenaza con dejarlos sin agua. Ello, porque los niveles en las represas de la zona han caído en 1,4 %. Este desastre natural, provocado por la sequía y el cambio climático, ha despertado las alarmas en el mundo.
En Colombia, estudios de organizaciones defensoras del medio ambiente y entidades oficiales como el Ideam han dejado en claro que el fenómeno también es preocupante. Nuestro país, a pesar de ser uno de los territorios con más riqueza hídrica en el planeta, podría quedarse sin agua suficiente para la atención de sus pobladores en el año 2050. Los motivos: la minería sin control, la deforestación, los incendios, la contaminación de los ríos y el crecimiento desmedido de la población en ciertos lugares donde se construyen viviendas sin un efectivo control urbanístico.
Nuestro país, a pesar de ser uno de los territorios con más riqueza hídrica en el planeta, podría quedarse sin agua suficiente para la atención de sus pobladores en el año 2050
El proyecto de Ley 126, con su enfoque poblacional, busca que paulatinamente las actividades económicas que se realizan en páramos y que los deterioran puedan ser desescaladas, reemplazadas y se pueda incorporar una visión vital y sostenible a estos ecosistemas, generando acciones creativas para darle valor desde el ecoturismo, las denominaciones de origen en la agricultura o incluso la bioprospección.
Con esta iniciativa pretendemos fijar los lineamientos técnicos y legales para delimitar estos ecosistemas que ocupan cerca de 3 millones de hectáreas, gestionarlos y reconocerlos como áreas estratégicas para el país. Generar oportunidades para los colombianos que habitan en los 400 municipios con zonas de páramo y conservar el agua que consumen la mayoría de los colombianos debe ser un compromiso para avanzar en un modelo de desarrollo más sostenible.