octubre 4, 2024

Procuraduría halló presuntas violaciones a los DD:HH en cárcel de Puerto Triunfo, Antioquia

La Procuraduría General inspeccionó la cárcel El Pesebre, en Puerto Triunfo, Antioquia. 

El ente de control halló deficiencias en el suministro de agua potable, en los servicios de salud, alimentación y hasta registró casos de presunta tortura y abuso sexual, circunstancias inhumanas que habrían provocado la muerte de al menos 16 reclusos en los últimos meses. 

Tras la inspección de la Delegada para los Derechos Humanos, se constató que el agua suministrada al centro penitenciario no es apta para el consumo humano, lo que ha provocado graves enfermedades a los convictos. Por si fuera poco, hay brotes activos de varicela, tuberculosis y paludismo que no son tratados de manera adecuada debido a la ausencia de personal médico capacitado.

Las directivas de la cárcel, Procuraduría General y el Viceministerio de Justicia adelantaron una mesa de trabajo en la que se estableció como compromiso la revisión del sistema de acueducto lo más pronto posible y el inicio de los estudios pertinentes para conectar directamente al centro carcelario con la planta de tratamiento más cercana. También se propuso la organización de una brigada interinstitucional para brindar atención médica a los reclusos. 

En cuanto a los casos de presunta tortura y agresiones sexuales, el Instituto Nacional Penitenciario (INPEC), ya adelanta investigaciones para establecer la veracidad de los hechos.

No es la primera vez que se especula sobre los crímenes de lesa humanidad al interior de la cárcel El Pesebre. De acuerdo con denuncias hechas por reclusos a medios nacionales, a diario se viven vejámenes como empalamientos y violaciones en masa y, lo más grave, con la complicidad y participación de los guardias. Los altos mandos de las AUC y comandantes de las Farc serían los responsables detrás de estos crímenes. 

“Nos amarran, nos golpean, nos dan palos en la cabeza, nos hacen chupar el pene de cada uno. Aquí no solo se ve el maltrato sexual, también la tortura psicológica y física de los cuadros de mando”, confesó uno de los reclusos a Semana.