La gestora social de Norte de Santander, Cecilia Soler de Villamizar, es una mujer comprometida con las necesidades de su pueblo. En sus tareas como Primera Dama del departamento, se ha dedicado a mejorar la atención en salud de las mujeres, madres gestantes y niños. Su continua preocupación es poder brindar calidad de vida y formación a la población infantil como aporte a la construcción de un mejor país. El departamento de Norte de Santander sirvió de escenario de una de las épocas más tristes de Colombia, ya que albergó por muchos años el peso de un conflicto armado interno que ha dejado cientos de víctimas y desplazados a lo largo y ancho del territorio. Consciente de la necesidad de sanar heridas para generar espacios de reconciliación y convivencia, Cecilia Soler se puso manos a la obra para ayudar a la reconstrucción de tejido social, especialmente en aquellas zonas que han padecido por décadas el abandono estatal. Aunque su labor se ha extendido a los distintos sectores de la población, las mujeres han tenido un capítulo especial. Lucha frontal contra el feminicidio Frente al creciente número de feminicidios que se están cometiendo en Norte de Santander, la docente impulsa un proyecto para brindar apoyo a las mujeres que sufren maltratos físicos y así servir de puente para ponerlas en contacto con las entidades encargadas de su protección. La iniciativa cobrará vida desde junio de 2018. “Hay que hacer un llamado a todas las gestoras sociales, porque no es solo en Norte de Santander que está sucediendo, es en todos los lados, es impresionante el alto número de casos que se están presentando”, asegura. Junto a la Secretaría de la Mujer, el despacho de la gestora social apoya las campañas de salud que se realizan de manera permanente. Es así como Soler se ha puesto a la cabeza de varios programas para reducir el riesgo de enfermedades como el cáncer de cuello uterino y de seno, con la realización a tiempo de citologías y ecografías mamarias. Una de las iniciativas de mayor acogida a nivel nacional, es la realización del evento Moda y belleza con un propósito, el cual es desarrollado por 26 fundaciones para recaudar fondos destinados a la atención de más de 20 mil personas en Norte de Santander. Esta actividad ha entregado 144 millones de pesos en total. Todas merecen atención Desde que asumió funciones, Soler ha direccionado el trabajo hacia la comunidad femenina de la cárcel de Cúcuta. El proyecto incluye una atención integral en salud, capacitaciones, belleza y servicios de psicología. Al programa se han sumado las universidades de Santander, Simón Bolívar, Francisco de Paula Santander y Pamplona. Estas instituciones ofrecen su apoyo a través de charlas orientadoras a las reclusas. Por su parte, el Instituto de Deportes de Norte de Santander (Indenorte) brinda orientación para el cuidado de su cuerpo y la creación de hábitos saludables. Una de las iniciativas de mayor impacto ha sido la capacitación en proyectos productivos. Como parte de esta actividad, las internas aprenden a elaborar artesanías y otros artículos en porcelanicrón, peluches, toallas, marroquinería, productos de belleza y muestras navideñas. El objetivo es darles herramientas para que puedan generar recursos económicos tanto para ellas como para sus familias. El apoyo en atención a su salud también ha tenido un espacio importante, ya que de manera continua se realizan citologías, ecografías mamarias y programas de vacunación. En caso de encontrar alguna anomalía, el despacho de la gestora social procura trasladar a la paciente al Hospital Universitario para que allí se le brinde el tratamiento que necesita. Este trabajo busca, a su vez, la prevención de enfermedades y una vida saludable. Soler ha direccionado el trabajo social hacia la comunidad femenina de la cárcel de Cúcuta. Cecilia Soler se puso manos a la obra para ayudar a la reconstrucción del tejido social. Un itinerario anual Uno de los principales aliados en la tarea que se realiza es la Caja de Compensación Familiar (Comfaoriente), con la cual se han podido desarrollar todos los programas que se encuentran actualmente en ejecución. “Se puede decir que ellos me acompañan a todo lo que hacemos desde el despacho. Han brindado un apoyo único para toda la labor social. Ellos tienen unas metas que se acoplan a las nuestras para su cumplimiento”, destaca Soler. Para lograr efectividad en los objetivos propuestos, se realiza un programa por mes y se repite el mismo itinerario cada año. En enero se desarrolla la campaña Todos a estudiar, a través de la cual unos 13 mil menores entre los 5 y 16 años de edad han podido acceder a útiles escolares y a charlas y actividades especiales para ellos. Otro evento para la niñez es Divernorte, realizado en abril, mediante el cual, más de 35 mil pequeños de todos los municipios recibieron juegos tradicionales como parte del programa de recreación y esparcimiento. Salud Los médicos han sido los protagonistas y a través de su labor se ha podido erradicar la malformación de labio leporino. Desde que se inició esta campaña, no se reportan casos de esta enfermedad en 23 municipios del departamento, según Soler. La cruzada ha permitido la inclusión de pacientes de Cartagena, Medellín y Bucaramanga. Es así como en tres años, se ha podido operar a un total de 150 personas. También, se realizan campañas para efectuar ecografías y detectar malformaciones congénitas, lo que ha permitido el seguimiento a 500 madres gestantes. Los exámenes para detectar cualquier indicio de cáncer de seno hacen parte de la atención en salud que se ofrece con resultados positivos en materia de prevención. Se calcula que al menos 900 ecografías han sido practicadas, las cuales han permitido que 60 mujeres estén hoy en tratamiento y control. Desde el 2006 en alianza con la Fundación Cardioinfantil de Bogotá, se realiza la campaña departamental de Cirugías de Corazón. Alrededor de 700 niños han sido examinados para determinar el nivel de complejidad de la cardiopatía. Entre el 2016 y el 2017, un total de 28