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En un operativo conjunto entre el Gaula de la Policía y el Gaula Militares, fue capturado Belmar Riobo Pérez, señalado cabecilla financiero de la compañía ‘Francisco Bossio’ del Ejército de Liberación Nacional (ELN). La detención se llevó a cabo en el municipio de Ocaña, en el marco de la Operación Catatumbo, y representa un nuevo golpe a las estructuras financieras de este grupo armado en el nororiente del país. Riobo Pérez, con más de 15 años de trayectoria en la organización insurgente, era buscado por delitos como terrorismo, rebelión, concierto para delinquir agravado con fines de extorsión y homicidio agravado. Además, está implicado en dos atentados terroristas perpetrados en 2019, en los que murieron tres miembros de la Policía Nacional.  El Catatumbo, una de las regiones más afectadas por el conflicto armado y el narcotráfico, ha sido escenario de enfrentamientos constantes entre el ELN y disidencias del Frente 33 de las FARC. Estas disputas por el control de rutas ilícitas han provocado el desplazamiento de más de 60.000 personas desde enero de este año. Desde el Ministerio de Defensa señalaron que Riobo también era el encargado de dinamizar las extorsiones a comerciantes, transportadores y empresarios en Norte de Santander, siendo pieza clave en la financiación ilegal del grupo armado.  La captura se da pocas semanas después de que el gobierno levantara el estado de conmoción interior en esta convulsionada zona fronteriza, medida que había sido adoptada para hacer frente al deterioro de la seguridad y garantizar los derechos fundamentales de la población civil. Con esta operación, las autoridades reafirman su ofensiva contra el multicrimen en la región del Catatumbo, considerada una de las más estratégicas para los intereses de grupos ilegales en el país.