Un gobierno que rompe los esquemas
Un gobierno que rompe los esquemas Alcalde de Castilla La Nueva, Willian Medina Caro. Desde el programa de gobierno trazado para el municipio de Castilla La Nueva, ubicado en el departamento del Meta, se sabía que para llegar lejos era necesario ser un territorio ejemplo, tener una organización eficiente, y, sobre todo, responder a las expectativas de sus habitantes frente a la solución de los problemas sociales más apremiantes de la región. De eso era consciente el alcalde Willian Medina Caro, quien se propuso gobernar con un reto claro: convencer a la gente de que se podían hacer más cosas, con menos. Tres años después, los resultados son palpables. De acuerdo con el alcalde Willian Medina, el plan Un Gobierno Transparente, Incluyente y Participativo, conllevaba retos inimaginables. Esto le implicaba a él y a su equipo de trabajo ser más novedosos e innovadores en la solución de los problemas sociales y económicos del municipio. En pocas palabras, buscaba romper con los esquemas y arriesgarse con un plan que sedimentara las bases de un territorio competitivo y de cara al futuro. Este objetivo fue determinante para consolidar lo que hoy es Castila La Nueva. Romper brechas sociales Medina se propuso gobernar con la gente y para la gente. Para el mandatario local, la educación es la base de todo el plan de desarrollo diseñado por su administración para este cuatrienio. Por eso la mayor inversión se hizo en ese sector. Se calcula que cerca del 30% del total de los ingresos del municipio iban destinados a mejorar la cobertura y calidad de la enseñanza en la región. Por eso se puso como meta aplicar la jornada única en todas las instituciones académicas. Y es que el alcalde considera que la baja calidad de la educación en el país obedece a las pocas horas de clase que tienen los estudiantes en las asignaturas básicas. Así que le apostó a aumentar la intensidad horaria con el fin de mejorar los procesos de formación en materia deportiva, cultural, tecnológica y lingüística. Hoy la región cuenta con el 76% de cobertura educativa y con la proyección de dejar totalmente financiado este sector al finalizar su mandato. Apostarle a lo que ya hay La ganadería y la minería se constituyen en la base de gran parte de la economía del territorio. Es por ello que la administración ha logrado apalancar procesos de desarrollo a través de la adquisición de nuevas tecnologías para hacer de Castilla La Nueva un municipio más competitivo. Además, como productora de hidrocarburos, esa región le da una dinámica fuerte en el sector económico, pues genera mano de obra de bienes y servicios, empleo y recursos. Medina asegura que cerca del 60% de la riqueza del municipio depende de esos factores, ya que, de las 51 mil hectáreas de extensión, 27 mil están dedicadas a la actividad ganadera. La formación integral de la población infantil ha sido la prioridad del alcalde desde el inicio de su mandato. ¿Qué se busca? La alcaldía le apostó a aumentar la intensidad horaria con el fin de mejorar los procesos de formación en todas las áreas El objetivo es dejarle a generaciones futuras la base de 4 un programa educativo sólido y de gran cobertura. Fortalecer los cuatro principales sectores productivos de esta tierra llanera prospera y prometedora. El primero es promover la modernización del campo a través de convenios con la Asociación de Ganaderos. “Se han sembrado cerca de 100 hectáreas de cacao y 500 de palma. Además, se ha montado 50 unidades productivas de gallinas ponedoras para familias vulnerables”, destaca el alcalde. En la segunda línea está el turismo, por lo que la administración ha tenido en cuenta las fincas agroturísticas y las zonas hoteleras para promover los paisajes de la región. También se ha propuesto traer a los inversionistas públicos y privados para que contribuyan a impulsar el sector. El tercer componente se basa en la Economía Naranja, un modelo económico soportado en la generación deriquezas a través del talento, la conectividady herencia cultural de las regiones. Fue tanto el interés de Medina por el programa que conformó lo que hoy se conoce en el municipio como Talento Naranja en Castilla. “Hay que tener los ojos puestos en la Economía Naranja porque es allí donde va el desarrollo. El mundo está cambiando y por eso tenemos que mirar hacia donde se va a ir con él”, señala. La cuarta línea de trabajo es todo el tema de servicios y mano de obra en la industria petrolera. “Estamos organizando el tema de mano de obra, capacitaciones, mejoras en las condiciones de bienes y servicios y hacer un proceso de acompañamiento a los empresarios locales”, asegura el mandatario. Saneamiento básico y agua Hace unos días la alcaldía anunció la creación de un proyecto que le garantiza agua potable a varias zonas de los cascos urbano y rural. Este consiste en un plan maestro de acueducto que se ajusta a las condiciones del territorio llanero, ante los cambios que ha tenido con el paso de los años. A través de un macroproyecto se le ha apostado a una fuente estable y natural que “abastece el casco urbano y ocho veredas cercanas”, explica la máxima autoridad municipal. Por eso, obtuvieron el certificado del IRCA 0 de 2018, el cual mide la capacidad y la cobertura en la prestación de este servicio. Las inversiones que se esperan a futuro para abastecer y ampliar el potencial de las plantas de tratamiento son una realidad. La meta “es que estás se consoliden y se les dé continuidad en otros gobiernos, pues para eso fueron diseñadas. La idea es garantizar un servicio de calidad durante los próximos 30 años”, afirma Medina. En el tema de gas natural está pendiente la instalación de una red para siete de las 14 veredas del municipio y dos centros poblados. Este año se espera terminar con el 80% de cobertura en gas domiciliario en las zonas rural y urbana. “Es un reto grande porque