La transformación que ha vivido Santa Marta bajo la administración de Rafael Martínez no solo le mereció el reconocimiento del DNP como una de las ciudades con mejor desempeño fiscal del país, sino también su ubicación como el segundo alcalde con mayor calificación en gestión (82%), según la más reciente encuesta del Centro Nacional de Consultoría. La revista El Congreso habló con el mandatario sobre los programas que ha puesto en marcha para conducir el puerto hacia el progreso económico y social.
La ciudad ha experimentado un cambio tanto urbanístico como social bajo su administración. ¿Qué destaca de los programas que se han puesto en marcha?
Santa Marta empezó a transformarse desde el 2012 bajo un gobierno ciudadano que ha logrado sacar a esta histórica ciudad del olvido en el que estaba sumergida. Todo lo que hemos logrado urbanísticamente y en lo social no ha sido por casualidad o que las cosas hayan ido llegando, esto es el resultado del gran ‘Plan Santa Marta 500 Años’, nuestra hoja de ruta para conseguir el cambio que hoy vive el Puerto, y que es destacado a nivel nacional.
Contar con un plan como este nos ha permitido mejorar progresivamente la calidad de vida de los samarios con equidad y sostenibilidad social, además de tener claro cómo enfrentar económicamente los retos que tiene la ciudad en infraestructura e inversión en temas sociales.
De todo este cambio que sigue viviendo Santa Marta, tenemos varios proyectos banderas como lo son: la gran infraestructura deportiva que logramos para la ciudad con la realización de los Juegos Bolivarianos 2017. Fueron 12 nuevos escenarios deportivos que hoy hacen parte de esta urbe y nos han permitido recuperar el deporte para niños, jóvenes y adultos.
Asimismo, tenemos otros aciertos como la gran ‘Red de Parques de la Equidad y la Alegría’ y la pavimentación masiva de vías con el programa ‘Mi Calle’, en el cual también concurre la comunidad.
Del mismo modo, a través de la implementación del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP), hemos logrado la culminación de proyectos estancados por años, como terminar la Avenida de El Río a la altura de la calle 29 entre carreras 4 y 5, logrando así mejorar la movilidad; intervenir la Avenida Campo Serrano entre las calles 22 y 29; iniciar la terminación de la calle 30, de la cual ya hay construida dos nuevas fases; arreglar la Avenida El Libertador y la carrera 19, además del anillo vial de El Líbano. En urbanismo también hemos realizado la intervención de colegios públicos. Aquí logramos remodelar la Institución Educativa Distrital Magdalena y la Rodrigo de Bastidas. Estas dos instituciones representan un cambio social, pues mejoran la calidad educativa.
Si nos referimos a lo social, tenemos nuestra gran apuesta a la educación técnica y tecnológica con la Unión Politécnica Distrital, proyecto que continúanos desde la administración pasada y que ha logrado que más de cinco mil jóvenes, madres líderes y población vulnerable de Santa Marta tenga acceso gratuito a la educación superior. Nuestro trabajo también se ha centrado en estar más cerca de las comunidades y mejorar su acceso a nuestro servicio social, es por eso que desarrollamos el programa de las ‘Ferias de la Equidad y el Buen Vivir’. Con esto, pudimos llevar hasta los más apartados de la ciudad todos los servicios en salud, educación, gobierno, etc.
Finalmente, seguimos con la masiva legalización de barrios y titulación de predios; con esto los barrios entraron a la legalidad y de esa forma pudimos seguir trabajando en más proyectos que nos permitieran el cambio en estos sectores.
¿Cómo avanza Santa Marta en la solución a su problema de agua?
La búsqueda de la solución definitiva a la problemática del agua en Santa Marta se emprendió desde la anterior administración del Distrito cuando se afrontó la escasez más crítica de agua en su historia como consecuencia directa del fenómeno de El Niño. En el 2014, el exalcalde Carlos Caicedo tocó las puertas del Gobierno Nacional para conseguir su apoyo en la financiación de un plan a corto, mediano y largo plazo que garantice el suministro del preciado líquido a la capital de Magdalena durante los próximos 50 años.
Inicialmente, el anterior gobierno samario consiguió, de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgos y Desastres (UNGRD), el apoyo económico para construir una batería nueva de pozos que unidos a los ya existentes sirvieron para resolver, a corto plazo, el suministro de agua potable a los diversos sectores de la ciudad. En ese mismo período, se gestionó y consiguió la realización de un estudio que permitiera identificar nuevas posibles fuentes de agua superficial para los samarios, que garantizaran el suministro de la misma a mediano y largo plazo. Como consecuencia de ello, se consideraron los ríos Córdoba y Toribio, que pasan por el municipio de Ciénaga, para surtir del líquido a Santa Marta, a mediano plazo, y al río Magdalena, a su paso por Barranquilla, como proveedor durante los próximos 50 años.
Para conducir el agua de esos afluentes hacia Santa Marta será necesaria la construcción de bocatomas, una nueva planta de tratamiento y acometidas de distribución. A lo anterior, el gobierno distrital planteó la necesidad de conseguir también la solución a los problemas de alcantarillado pluvial y sanitario que registra Santa Marta.
El presidente Juan Manuel Santos comprometió su palabra y buena parte de la financiación de las soluciones definitivas para Santa Marta en cuanto a agua y alcantarillado, obras que requerirán una inversión de 3.2 billones de pesos, de los cuales la Nación aportará 1.5 billones, el Distrito 1.2 billones y la suma restante se generará por concepto de facturación.
El Departamento Nacional de Planeación (DNP) presentó el año anterior el esquema de la Asociación Pública Privada (App) en Santa Marta, el cual después se socializó con el Concejo. En diciembre pasado, el gobierno samario presentó ante el Viceministerio de Agua Potable los documentos por medio de los cuales se busca la viabilidad técnica de esa App. En este mes, el alcalde se reunió de nuevo con los concejales para ventilar el tema de la App, por cuanto a ellos presentará en marzo próximo el proyecto de acuerdo, por medio del cual se busca poder comprometer vigencias futuras del presupuesto distrital para cofinanciar las obras de acueducto y alcantarillado que se ejecutarán durante los próximos 30 años.
Paralelamente, desde abril de 2017, la ciudad recuperó el manejo de sus sistemas de acueducto y alcantarillado tras dar por terminada la concesión a un operador que la mantuvo por más de 26 años consecutivos. Hoy, esos sistemas los maneja la Empresa de Servicios Públicos del Distrito de Santa Marta (Essmar) y su aliado estratégico Veolia, que han invertido más de 10 mil millones de pesos en mejoras a esos dos servicios.
¿En dónde puede estar el origen del problema de inseguridad en el puerto?
Santa Marta es hoy más segura, las cifras nos favorecen y el logro principal de este modelo de gobierno fue salir del ranking de las 50 ciudades más violentas del mundo. A pesar de todo esto, tenemos un problema de percepción ciudadana, que es lo que nos puede generar que el samario se sienta inseguro, sin embargo, nuestra realidad es muy distinta. Al cierre del año pasado, logramos avances importantes en esta materia, pero estas mejoras, no se dan por sí solas. Parten de un ejercicio plural y participativo de conocimiento del entorno, de las dinámicas sociales y territoriales y de las afectaciones a la seguridad en las que la ciudad ha sido expuesta.
Para tener estos resultados se creó la Policía Metropolitana y, con ello, se aumentó el número de efectivo en la ciudad. También creamos la Secretaría de Seguridad y dentro de ella el Observatorio Distrital de Seguridad y Convivencia, que hace un trabajo minucioso de análisis, monitoreo y estudio de todas las afectaciones a la convivencia en el Distrito. También hemos entregado una amplia inversión en vehículos para la fuerza pública, pago de recompensas, instalación y mantenimiento de cámaras de seguridad en el sector urbano, pero también en el rural, entre otras actuaciones importantes.Todas estas medidas, inversiones y esfuerzos nos están trayendo sus recompensas: en los últimos tres años, Santa Marta es la ciudad que más ha reducido las tasas de homicidios, extorsión, hurto a personas. Debemos seguir mejorando nuestra cifra, para además lograr que los samarios se sientan más seguros, ese es nuestro reto para este 2018.
¿Cómo está enfrentando su administración el éxodo de venezolanos?
Desde la Secretaría de Seguridad y Convivencia se ha establecido un equipo multidisciplinario e interinstitucional con la Policía Metropolitana, Migración Colombia y la Personería Distrital, en razón de la cual se traslada al Centro de Protección al Ciudadano a los venezolanos cuya permanencia en la ciudad se da de manera irregular. Allí, se les presta atención migratoria y se realiza la identificación plena de su identidad.
En cuatro meses de trabajo se han trasladado más de 1.500 personas que se encuentran ejerciendo actividades económicas en espacio público. Esto ayuda a la percepción de seguridad ciudadana y también permite detectar quiénes se encuentren de manera irregular para poder normalizar su situación, también se han detectado personas con solicitudes de Interpol, las cuales de inmediato son puestas a disposición de la autoridad que los requiere.
En lo concerniente a educación, más de 250 niños, de origen venezolano, que han llegado a la ciudad en el último año, reciben su educación en instituciones educativas distritales; la vinculación de los niños y los jóvenes del vecino país al Sistema Educativo Distrital ha sido posible en atención a una directriz del Gobierno Nacional que dispuso que se les incorporara a los planteles estatales, donde su permanencia se financia con los dineros transferidos a través del Sistema General de Participación para educación.
En lo atinente al Distrito de Santa Marta, se está realizando el acompañamiento para que les sea prestado el servicio de salud en los casos de urgencia vital, acorde con el marco legal vigente; además, se han expedido 210 autorizaciones de servicios durante el año 2017 para la población venezolana, de acuerdo con los datos estadísticos del Centro Regulador de Urgencias.
Estamos realizando gestiones para que se incluya a Santa Marta en los municipios priorizados en asignación de recursos para la atención de extranjeros, pues, a pesar de no encontrarnos en zona geográfica de frontera, sí somos un territorio con alta tasa de recepción de extranjeros, migrantes y en especial de venezolanos.
¿De qué manera ha afrontado el proceso que cursa en su contra?
Nosotros siempre hemos manifestado nuestra decisión de concurrir a un juicio para que allí se nos permita demostrar que siempre hemos actuado con transparencia, pensando en el bien común y trabajando por mejorar las condiciones de vida de todos quienes vivimos en Santa Marta. Nosotros estamos tranquilos, le decimos a la ciudad que sabemos cómo hemos obrado, lo hemos hecho con transparencia, cada una de nuestras actuaciones están ahí disponibles para que la valoren. De hecho, ya les hemos enviado todos los documentos requeridos. El fiscal cometió un error garrafal al no mostrar ningún tipo de pruebas. Es más, ese mismo fiscal, por vivir en Santa Marta, es testigo de todo el proceso de transformación que, desde nuestra administración, venimos adelantando en la capital de Magdalena.
¿Qué tanto ha avanzado la alcaldía para fortalecer el turismo en la ciudad?
Colombia ha tenido un incremento porcentual significativo en el sector turístico. Dentro de ese porcentaje, Santa Marta es la ciudad que ha tenido más crecimiento comparativo. La Ciudad es cultural en esencia. Somos la ciudad más antigua de Colombia. Con la creación del Instituto Distrital de Turismo (Indetur), nuestro gobierno cuenta con una entidad descentralizada con capacidad de toma de decisiones y presupuesto para la promoción del puerto. Hemos sacado adelante el proceso de creación de Marca Ciudad, que involucró a los samarios y residentes no samarios. También logramos la constitución de cuatro promotoras para mejorar la gestión e impulsar una gobernabilidad democrática en sitios emblemáticos de la ciudad como lo son El Rodadero, Taganga, Minca y el Centro Histórico, proyectos articulados con otras entidades de formalización del turismo.
Con el Plan de Ordenamiento de Playas, queremos ofrecer y promocionar un producto de calidad. Unas playas ordenadas y seguras para el aprovechamiento de todos los turistas. Hemos venido adelantando gestiones para certificar lugares emblemáticos como Playa Blanca en Banderas Azules y Minca como destino sostenible para cumplir con estándares nacionales e internacionales de calidad.
Estamos realizando gestiones para la internacionalización del aeropuerto Simón Bolívar y, por ende, nuestro destino. Fuimos a Routes Américas, celebrada este año en Quito, Ecuador, de manera articulada con la concesión Aeropuertos de Oriente.
Estamos trabajando de manera articulada con la Cámara de Comercio, la Policía de Turismo, el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, a través de Indetur para acabar con prácticas informales específicas como la parahotelería. Durante la reciente temporada de fin y comienzo de año, se consiguieron excelentes resultados en esa causa.
Creamos proyectos para potenciar la conectividad como el cable Rodadero-Centro-Minca, el Tren de Cercanías, la creación de seis embarcaderos turísticos, para brindarle más conectividad y opciones de transporte integrado a nuestros turistas.
Hemos capacitado alrededor de 700 prestadores de servicio turístico en el idioma inglés con el fin de brindar una oferta con un enfoque más internacional y enfocado a nuestros públicos estratégicos, como aquellos provenientes de Estados Unidos. También, hemos conseguido incrementar el número de llegada de cruceros internacionales al puerto local y, con ello, el número de visitantes extranjeros a nuestra ciudad, labor en la que se continuará trabajando de forma intensa.
¿En qué concentrará los esfuerzos en lo que le resta de administración?
Si bien la ciudad ha avanzado mucho en estos últimos años, sabemos que aún hay muchos déficit por cubrir, especialmente la solución al problema de agua potable y alcantarillado. En lo que nos resta de este año, estaremos trabajando en lograr la Asociación Público Privada (APP) para conseguir que por fin Santa Marta cuente con un servicio digno de acueducto y alcantarillado, aquí el esfuerzo deberá ser tanto del Gobierno Nacional como del Distrito y los mismos samarios. Si logramos esto, la ciudad tendrá calidad en estos dos servicios por más de 50 años.
Otra de nuestras apuestas es seguir trabajando para que los samarios menos favorecidos tengan una vivienda propia y digna, si bien ya no hay casas gratis, nosotros como Distrito hemos creado la ruta a través de una bancarización masiva y articulación con el Fondo Nacional del Ahorro, que nos ayude a que un importante segmento de nuestra población pase de pagar arriendo a tener su casa. Nuestros esfuerzos también seguirán direccionados a fortalecer nuestros programas sociales y de inclusión, tales como las escuelas distritales de música, baile, teatro, deporte, entre otras. Asimismo, tenemos como meta ampliar el apoyo de la Unión Politécnica Distrital, proyecto que beneficia a más de cinco mil personas en educación técnica y tecnológica.
Finalmente, tenemos proyectado la puesta en marcha del Sistema Estratégico de Transporte Público (SETP), tras terminarse cada una de las obras que este contempla; la recuperación, de la mano con Corpamag, del río Manzanares; el mejoramiento de la malla vial de la capital magdalenense y fortalecer a Santa Marta como destino turístico nacional e internacional, para lo cual consideramos prioritario internacionalizar nuestro aeropuerto y conseguir la ampliación de su pista.